¿Qué es mejor?
Nos pasamos la vida cuestionándolo todo, preguntando continuamente ¿qué es mejor? e incluso, ¿qué es peor?
Y sin embargo, no nos detenemos a pensar que todo es mejor o peor dependiendo de nosotros mismo. Nadie debe elegir por ti.
Y ustedes dirán ¿a qué viene todo esto? Pues aquí va:
En la entrada anterior hablé sobre el estilo de vida que adoptado desde hace algunos (pocos) meses y que me siento muy cómoda desde entonces. Casi al final comenté que la carne había pasado a un segundo plano pero subrayé que no soy vegana y que hablaría un poco sobre esto.
Actualmente conozco a muchas personas que son veganas o vegetarianas. Algunos en mi trabajo (pues soy camarera) pero la mayoría son de mi entorno: familia y amigos.
Comencé este texto hablando sobre el hecho de cuestionarlo todo porque siempre que alguien dice que no come carne o que sí come carne sale a relucir la frase ¿eso no es malo?
En la alimentación todo es malo y todo es bueno dependiendo del modo en que lo empleemos, de la cultura, el clima, y lo más importante: de nuestra genética. Y. para bien o para mal el punto importante está ahí: conocer si dicha dieta responde a esos caracteres genéticos que hemos adquirido de nuestros ancestros.
Para hablar sobre este tema me he estado informando y en una página decían algo muy interesante y que resumo a continuación:
Las carnes, los azúcares y las grasas son malos si son exclusivos en nuestra dieta, y por consiguiente, si solo consumes fruta... será igual de malo.
Los humanos somos cerebro por encima de todo: no somos vacas con muelas planas, ni tigres con garras y colmillos. Y aunque seamos onmívoros por naturaleza, nuestro órgano pensante nos ayuda a elegir qué método alimenticio queremos adquirir, cuál nos sirve y cuál no nos ayuda en absoluto (aunque nos empeñemos)
Sí es cierto que los veganos tienden a presentar un gran déficit de vitamina B12, y de otros muchos minerales (aunque en menos cantidad) como son el hierro, el calcio, los ácidos grasos omega-3 y el zinc.
Está demostrado que existen muchos alimentos que no tienen un origen animal (porque recordemos que no consumen ni siquiera huevos, leche o miel) y que contienen la Vit.B12 como pueden ser las algas o derivados fermentados de la soja, pero en una cantidad tan insuficiente que no podría abastecer nuestra necesidad y terminaríamos con muchas enfermedades, en especial, la anemia, que viene siendo la más conocida.
El vegetariano, por el contrario, podría solventar esa necesidad de forma natural consumiendo huevos y leche. Y a diferencia de los omnívoros, tienen menos posibilidades de morir de cáncer o de isquémia del corazón.
Ya sé que estamos en pleno Siglo XXI pero pondré este ejemplo extremo para que se hagan una idea: si no existieran los suplementos a los que tienen que recurrir los veganos para completar su dieta y así tener una vida sana, simplemente no podrían sobrevivir. De hecho históricamente algunos grupos de hombres primitivos se alimentaban exclusivamente de plantas (dependían de un hábitat limitado). Su cerebro fue creciendo y fue adquiriendo habilidades y necesitaba ``gasolina´´ para abastecer su cerebro y dicho crecimiento. Los vegetarianos que no se adaptaron quedaron en el camino. Los demás evolucionamos... y estamos aquí. Pero eso queda para la historia.
Con todo esto no quiero decir que esté peor o mejor.
Yo, por ejemplo, no puedo elegir una dieta sin proteína animal pues suelo tener de forma natural desajustes en el hierro y en la hemoglobina, por lo tanto, mi organismo me pide muchas veces la ingesta de carne, aunque yo haya usado mi cerebro para que eso siga ocurriendo pero de forma controlada y consciente para no afectar mi salud.
En resumen, en el sexo y en la alimentación nadie debe elegir por ti.
Info: en la próxima entrada hablaré sobre el glute, pero antes dejaré algunas recetas fáciles y ricas que he hecho... para todos pero en especial para veganos.
GRACIAS & hasta pronto
-MichelleVS
Y sin embargo, no nos detenemos a pensar que todo es mejor o peor dependiendo de nosotros mismo. Nadie debe elegir por ti.
Y ustedes dirán ¿a qué viene todo esto? Pues aquí va:
En la entrada anterior hablé sobre el estilo de vida que adoptado desde hace algunos (pocos) meses y que me siento muy cómoda desde entonces. Casi al final comenté que la carne había pasado a un segundo plano pero subrayé que no soy vegana y que hablaría un poco sobre esto.
Actualmente conozco a muchas personas que son veganas o vegetarianas. Algunos en mi trabajo (pues soy camarera) pero la mayoría son de mi entorno: familia y amigos.
Comencé este texto hablando sobre el hecho de cuestionarlo todo porque siempre que alguien dice que no come carne o que sí come carne sale a relucir la frase ¿eso no es malo?
En la alimentación todo es malo y todo es bueno dependiendo del modo en que lo empleemos, de la cultura, el clima, y lo más importante: de nuestra genética. Y. para bien o para mal el punto importante está ahí: conocer si dicha dieta responde a esos caracteres genéticos que hemos adquirido de nuestros ancestros.
Para hablar sobre este tema me he estado informando y en una página decían algo muy interesante y que resumo a continuación:
Las carnes, los azúcares y las grasas son malos si son exclusivos en nuestra dieta, y por consiguiente, si solo consumes fruta... será igual de malo.
Los humanos somos cerebro por encima de todo: no somos vacas con muelas planas, ni tigres con garras y colmillos. Y aunque seamos onmívoros por naturaleza, nuestro órgano pensante nos ayuda a elegir qué método alimenticio queremos adquirir, cuál nos sirve y cuál no nos ayuda en absoluto (aunque nos empeñemos)
Sí es cierto que los veganos tienden a presentar un gran déficit de vitamina B12, y de otros muchos minerales (aunque en menos cantidad) como son el hierro, el calcio, los ácidos grasos omega-3 y el zinc.
Está demostrado que existen muchos alimentos que no tienen un origen animal (porque recordemos que no consumen ni siquiera huevos, leche o miel) y que contienen la Vit.B12 como pueden ser las algas o derivados fermentados de la soja, pero en una cantidad tan insuficiente que no podría abastecer nuestra necesidad y terminaríamos con muchas enfermedades, en especial, la anemia, que viene siendo la más conocida.
El vegetariano, por el contrario, podría solventar esa necesidad de forma natural consumiendo huevos y leche. Y a diferencia de los omnívoros, tienen menos posibilidades de morir de cáncer o de isquémia del corazón.
Ya sé que estamos en pleno Siglo XXI pero pondré este ejemplo extremo para que se hagan una idea: si no existieran los suplementos a los que tienen que recurrir los veganos para completar su dieta y así tener una vida sana, simplemente no podrían sobrevivir. De hecho históricamente algunos grupos de hombres primitivos se alimentaban exclusivamente de plantas (dependían de un hábitat limitado). Su cerebro fue creciendo y fue adquiriendo habilidades y necesitaba ``gasolina´´ para abastecer su cerebro y dicho crecimiento. Los vegetarianos que no se adaptaron quedaron en el camino. Los demás evolucionamos... y estamos aquí. Pero eso queda para la historia.
Con todo esto no quiero decir que esté peor o mejor.
Yo, por ejemplo, no puedo elegir una dieta sin proteína animal pues suelo tener de forma natural desajustes en el hierro y en la hemoglobina, por lo tanto, mi organismo me pide muchas veces la ingesta de carne, aunque yo haya usado mi cerebro para que eso siga ocurriendo pero de forma controlada y consciente para no afectar mi salud.
En resumen, en el sexo y en la alimentación nadie debe elegir por ti.
Info: en la próxima entrada hablaré sobre el glute, pero antes dejaré algunas recetas fáciles y ricas que he hecho... para todos pero en especial para veganos.
GRACIAS & hasta pronto
-MichelleVS
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