Pasados por aguas.

Creo... Bueno... Si es por creer. Prefiero creer que Dios o lo que sea que exista te hizo para mi. 
Pero sinceramente estoy segura que te gustaría ducharte conmigo. Bueno... ducharte no. Juntar tu cuerpo al mio en un pasión que ni el agua podría apagar. Tu cuerpo y el mío juntos. Bueno... Juntos no. Entrelazados. Mezclando cada gota de agua con saliva, latidos, miradas, miradas e infinidad de miradas. Bueno... Miradas no. Relámpagos que se cuelan por los ojos y te llegan a estremecer el alma. Dos almas. ¡No solo una! Dos almas en una sola. 
El vapor no nos dejaría vernos reflejados en el espejo. Pero es entonces cuando cerraría los ojos te tomaría las manos y te haría recorrer mi cuerpo para que lo aprendieras de memoria. Dejando tus huellas en cada rincón, en cada poro, en cada vello. 
Después muy despacito te dejaría ciego a besos y así sentirías mejor el olor que desprende mi cuerpo y el tuyo, impregnando todo el baño de las más dulces, frescas y naturales fragancias.
No habría espejos, ni sonido del agua. Ni agua que se interponga entre nosotros. Ni luz. Solo sonido. El sonido de nuestros gemidos. Nuestros gemidos mojados. 
Solos tú y yo. 
Tú cuerpo y el mío.
Tú alma y la mía fundidas en una danza. Bueno... En una danza de amor y pasión pasada por agua. Una danza regada con sensaciones imposibles de olvidar. Una danza al grito de dos cuerpos que se llaman, se buscan y se aman. 

-MichelleVS

Irving Penn

                                                                                                     

Comentarios

Entradas populares